Frutas y verduras: ¿quién controla que lo que compramos en la verdulería es seguro?

En Argentina, el SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) controla la inocuidad de las frutas y hortalizas que consumimos, pero en esta nota nos enfocamos en otra institución que hace su aporte a este control (de la cual tal vez pocos sabíamos): los laboratorios del Mercado Central de la Provincia de Buenos Aires.

Nota: Este artículo ha sido escrito con información proveniente del sitio oficial del Mercado Central de la Provincia de Buenos Aires. Para más información, sugerimos visitar su página web: http://www.mercadocentral.gob.ar/.

Es habitual que los habitantes de la provincia de Buenos Aires asocien el Mercado Central con la venta de frutas y verduras a precios accesibles, imaginando grandes galpones repletos de cajones con verduras y frutas frescas que luego llegan a la verdulería o al mercado cercano a nuestras casas. Pero, ¿sabías que además el Mercado Central de la Provincia de Buenos Aires tiene un laboratorio? Sí, un laboratorio, con tubitos, microscopios, etc. como el laboratorio que seguramente estás imaginando mientras leés estas líneas.

El Mercado Central de Buenos Aires es el único mercado concentrador de frutas y hortalizas del país que cuenta con sus propios laboratorios de análisis. En total son 4 y tienen la responsabilidad de planificar, establecer y ejecutar los procedimientos analíticos de control para garantizar la inocuidad y calidad de los productos alimenticios que se comercializan en el Mercado Central de Buenos Aires, verificando el cumplimiento de las normativas actuales.

Un equipo de técnicos y profesionales especializados trabajan en estos 4 laboratorios:

  1. Laboratorio de frutas y hortalizas
  2. Laboratorio de microbiología
  3. Laboratorio de sanidad vegetal
  4. Laboratorio de productos pesqueros
¿De qué se encarga cada uno?

El laboratorio de frutas y hortalizas chequea el cumplimiento del límite máximo de residuos de plaguicidas, analiza la presencia de colorantes en frutos cítricos y controla el grado de madurez en frutos cítricos, kiwi, palta y uva. Si en estos análisis se detecta alguna irregularidad, esos productos son decomisados, no llegan al circuito de compra-venta y, por último, son destruidos.

El laboratorio de microbiología se encarga de analizar que no estén presentes microorganismos que tienen muy mala fama (¡y con justa razón!), porque son aquellos organismos responsables de muchas ETAs (enfermedades transmitidas por alimentos):Escherichia coli (principalmente, en muestras de hortalizas de hoja, frutas y verduras trozadas y para venta directa al público), Salmonella sp y Listeria monocytogenes. Otra función importante de este laboratorio es controlar la calidad del agua que abastece a la Corporación del Mercado Central.

Pasemos al laboratorio de sanidad vegetal. Sabemos que los cultivos, como las personas y los animales, también se enferman. Entre el 26 y el 40 por ciento de la producción mundial de cultivos se pierde anualmente debido a malezas, plagas o enfermedades transmitidas por insectos y microorganismos (como virus, hongos y bacterias). Para prevenir o reducir estas pérdidas, los agricultores utilizan insumos que permiten aumentar la producción de alimentos seguros y de calidad. Al protegerlos de las malezas, plagas o enfermedades, los herbicidas, insecticidas y fungicidas prolongan la vida de los cultivos, contribuyen a prevenir las pérdidas posteriores a la cosecha y ayudan a los agricultores a producir más alimentos en menos tierra.

En relación a estos productos, el laboratorio de sanidad vegetal realiza las siguientes tareas:

  • (…) “Dictamina sobre el estado fitosanitario de los productos frutihortícolas que se comercializan en la Corporación en base al resultado de los análisis efectuados.
  • Da asistencia técnica a los Operadores, Productores y Técnicos, en temas de su especialidad.
  • Participa en trabajos de desarrollo e investigación para la presentación de los mismos en congresos, seminarios.” (…)

Finalmente, el laboratorio de productos pesqueros chequea que los productos pesqueros sean frescos, siguiendo lo establecido por el CAA (Código Alimetario Argentino), también monitorea los niveles de Nitrógeno Básico Volátil en distintas especies y determina la presencia de Escherichia coli O157:H7 en productos lácteos y carnes.

La importancia del lavado de frutas y verduras. Los consumidores también debemos actuar.

Los organismos de control nos cuidan pero, como consumidores, también tenemos la responsabilidad de seguir ciertas normas de higiene y manipulación de alimentos para prevenir enfermedades. Cuidar la inocuidad de los alimentos en el hogar es una buena práctica para el consumidor e incluye el lavado de frutas y verduras. En este artículo te contamos por qué lavar las frutas y verduras antes de prepararlas y/o consumirlas es indispensable. http://infoalimentos.org.ar/temas/inocuidad-de-los-alimentos/324-el-lavado-de-frutas-y-verduras-una-practica-indispensable-antes-de-prepararlas-y-o-consumirlas

 



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